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Lo primero es enjabonarse con pastilla de jabón y champú para el cabello, sentados en taburetes. Utilizar una pequeña toalla y sacarse brillo todo el cuerpo... hasta que empiecen a salir spaguettis de células caducás. Aclararse con la ducha adosada en la pared o con cubetas de agua que dulcemente nos deja como una patena. Nos espera una enorme bañera de agua caliente a la que uno se mete para relajarse después de haberse limpiado bien.
En Japón les encantan los baños.
Incluso tienen su protocolo de conducta:
- No se puede entrar en la bañera en bañador o ropa interior.
- No llevar la toalla dentro de la bañera.
- Dúchate bien antes de entrar.
- No está permitido lavar la ropa en el interior de la bañera.
- Sécate bien antes de salir.
- No malgastes agua.
- No entrar en chanclas.
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