jueves, 9 de enero de 2020

Dios mío ¿Pero que te hemos hecho... ahora?... Philippe de Chauveron


Película: Dios mío ¿Pero que te hemos hecho... ahora? 
Año: 2018
Duranción: 99 min.
País: Francia
Dirección: Philippe de Chauveron
Guion: Philippe de Chauveron, Guy Laurent
Fotografía: Stéphane Le Parc
Reparto: Christian Clavier, Chantal Lauby, Ary Abittan, Medi Sadoun, Frédéric Chau, Noom Diawara, Frédérique Bel, Julia Piaton, Émilie Caen, Élodie Fontan, Pascal N'Zonzi, Salimata Kamate, Tatiana Rojo, Claudia Tagbo, Hedi Bouchenafa, Loïc Legendre, Patson, Gilles Cohen, Philippe Beglia, Marie-Hélène Lentini, Michel Emsalem, Christelle Burger, Matthieu Burnel
Productora: Les Films Du Premier / TF1 Films Production
Género: Comedia. Secuela. Familia
Premios: ninguno

Sinopsis:

En 2014 se estrenó, con éxito de taquilla, la película francesa Dios mío, ¿pero que hemos hecho?. En ella conocimos al matrimonio de Claude y Marie Verneuil y a sus tres yernos, el argelino, el judío y el chino. Tienen la esperanza de que la cuarta hija se case con un católico. En esta segunda parte, efectivamente, lo hace: sólo que es negro. 
Poco después, los cuatro yernos están decididos a abandonar Francia con mujeres y niños para probar suerte en el extranjero. 
Sus yernos multiétnicos ya no pueden soportar "este país de denunciantes, donde hay demasiadas huelgas, cargas sociales e impuestos para pagar", dicen. Los cuatro están decepcionados con esta Francia triste y amargada.
Los suegros hacen todos los movimientos posibles para hacerles amar a Francia y sobre todo la dulce vida familiar de provincias. 
La familia Verneuil quieren evitar que los yernos lleven a la práctica sus planes llevándose a sus hijas y sus nietos.

Me acordé de la película brasileña: Loveling/Benzinho/Siempre Juntos de Gustavo Pizzi.


Situarnos con la Película  

Siempre es difícil hacer una segunda parte, especialmente después del inmenso éxito en 2014 de ¿Qué le hicimos al buen Señor? que atrajo a 12 millones de espectadores en Francia y generó ingresos de $ 1,500,000 en Quebec.

Vemos al actor Christian Clavier convertido en notario apunto de jubilarse, felizmente casado y con cuatro hijas. Miembro, por tanto, de la clase media-alta francesa, que, de haber sido parisinos, vivirían en el Distrito XVI, pero que lo hacen en Chinon, población del corazón histórico de Francia. 

Nuestro análisis de la Película

Este año que a terminado 2019 he visto 2 películas que me han ayudado a entender los problemas de la Francia actual: Gloria Mundi de Robert Guediguian: problemas de la clase media empobrecida y Les Misérables de Ladj Ly sobre las banlieues de París. En mi canal están las críticas a estas 2 películas que recomiendo encarecidamente por su alto interés.

Me faltaba ver una película de la clase media alta acomodada, e volià aquí tenemos Dios mío ¿pero que hemos hecho ahora?  

Tengo la duda de si la película es una caricatura de la sociedad francesa y el director solamente ha aspirado a hacer reír un poco, con un tema que tiene algo de verdad, o si es que la sociedad francesa en su declinar ha generado el verdadero drama étnico-social que está en el fondo del argumento de esta película

De todas formas, la película quiere ser amable y quitar hierro a este problema francés. Pero es una película tramposa: dice una parte de la verdad, pero no la totalidad de la verdad. 

Intenta reconciliar los extremos, pero se niega a reconocer que hay aspectos que la experiencia demuestra que no pueden ser reconciliados solamente mediante buena voluntad y recurso del humor “blanco” el más inofensivo. 

El director ha caminado al borde de la navaja de lo políticamente correcto y nos pide a los espectadores, una “mente abierta”. La película es entretenida, pero llega a cansar por el tono en el que está realizada y, sobre todo por eludir con humor los problemas que me llaman la atención:

1.- ¿Por qué la mujer francesa ya no encuentra a hombres franceses para casarse? (si es verdad que no los encuentra).
La mujer francesa siempre ha tenido fama de “difícil”. Con el tiempo, esta fama ha ido creciendo. A esto se han unido otras circunstancias sociológicas y económicas, lo que ha hecho descender el número de matrimonios heterosexuales y la natalidad. 

Otros aspectos son: 
El hombre francés tiende a casarse mayor, 
la homosexualidad ha alcanzado unos niveles superiores a otras épocas
Las mujeres, rozando los 40 años, aplazan la fecha en la que deciden vivir en pareja, sin el plan de formar una familia y tener hijos.

2.- ¿Por qué los inmigrantes intentan casarse con mujeres francesas? (si es verdad que se produce este fenómeno)
En Francia no se pueden realizar encuestas que tengan como fondo una temática étnica. Podemos formular la pregunta pero no vamos ha encontrar respuesta.

Parece ser que para los inmigrantes, la mujer francesa tiene más cualidades, más cualificada intelectualmente, más chic, más sofistica, más desenfadada, más atractivas, más eróticas. No es lo mismo un burka o un bikini. 

Pero, y esto es importante, se tiene la sensación de que los matrimonios multiculturales son pocos.

3.- ¿Cómo son este tipo de matrimonios?
De los pocas uniones que se generan, un alto porcentaje: son breves. A eso contribuye el que las diferencias antropológicas y culturales son muchas y, salvo que la mujer, tenga una especial fascinación por la cultura de su cónyuge o una especial capacidad para la adaptación, el único punto en común es el amor inicial y los hijos. Cuando lo primero desaparece, si no hay hijos, la unión se disuelve con la misma facilidad con la que se ha formado y si los hay, puede darse que cada una de las partes asuma la lucha por la custodia o bien que ambos se resignen a seguir la vida en común.

La situación planteada por la película tiene mucho que ver con los “arquetipos”, pero los arquetipos no son gratuitos: son, de alguna manera, un reflejo de la realidad, por mucho que algunos las tengan por "apreciaciones racistas”. 

El musulmán medio que vive en Francia no es, desde luego, abogado. De la misma forma que el judío estandar no busca vender alimentos halal a los moros. Y respecto a los orientales los hay con alto poder adquisitivo (al igual que árabes y judíos), aunque la mayoría no lo tienen. En cuanto al yerno negro y católico, actor de teatro, tampoco resulta habitual en Francia. La presencia de negros antillanos es una minoría ridícula en el vecino país. La mayor parte de negros residentes en Francia, proceden del África Occidental francófona. Lo normal es que practiquen el Islam y algunos, incluso, la ablación del clítoris.

La sensación que quiere transmitir la película, es que un parte de la inmigración residente en Francia ha conseguido unos niveles de bienestar económico e integración inigualables… eludiendo el espinoso problema de que, esto solamente ha sido alcanzado por una minoría ínfima entre la inmigración, teniendo como contrapartida en que París rivaliza con Nueva York en multiplicidad de mafias, “mafias étnicas”: existe una mafia argelina especializada en tráfico de heroína, existe una mafia china que practica el racquet de protección, existe una mafia vietnamita, una mafia judía, una mafia nigeriana, etc, etc., etc., completamente ausentes de esta película: como si las hijas de la clase media-alta francesa solamente tuvieran acceso a conocer miembros de una clase media-alta inmigrante. Sin olvidar que los yernos parecen completamente desconectados de sus grupos étnicos respectivos, cuando en realidad  es otra.

La película termina siendo banal. Plantea una situación increíble, pero no apura el fondo de la cuestión, ni ninguna de las temáticas que nos rodean y nos preocupan.

Director

Philippe de Chauveron repite los tópicos, caricaturas y racismo burgués de Dios mío, ¿pero qué te hemos hecho? 
aunque el proyecto sea recordar las delicias de vivir en un "paraíso" llamado Francia. 

El director dice haberse inspirado en su propia familia para conducirnos en este curioso argumento de matrimonio mixtos. 
Chauveron se las arregla para sacar adelante un alegato en favor de los lazos familiares, dejando siempre claro que al final, todos compartimos el mismo tipo de prejuicios sea cual sea el color de nuestra piel.

Guión

La corrección política ahoga el verdadero humor.
Lo peor: Chistes forzados…
Los diálogos no parecen naturales, se recitan con un regusto de indiferencia.
Todo es muy predecible, chistes infantiles, humor tonto, muy políticamente correcto (qué mejor que una familia donde todos sus descendientes sean hijos de inmigrantes), el judío que termina queriendo al argelino, el chino que financia al judío que no tiene ni un duro, el argelino ayuda como abogado del chino, el negrito al que todos quieren porque es muy simpático, el francés ricachón que es medio tonto...)

La película de Philippe de Chauveron contiene una moraleja también muy clara: el amor todo lo puede y es lo único importante. El amor entre padres e hijos, entre parejas e incluso entre familias políticas. 

La película pretende reírse de todo y de todos. Finalizando en un moraleja que con amor y respeto todos tienen sitio en la sociedad francesa.

Actores

Christian Clavier tiene la distinción de Caballero de la Legión de Honor de Francia es la más conocida e importante de las distinciones francesas. Fue establecida por el emperador Napoleón I de Francia en 1804. No está muy brillante aunque sostenga la película.

Los actores hacen un trabajo pobrísimo con unos papeles sin la menor profundidad, carecen totalmente de una comicidad hilarante. Sueltan sus frases, ponen caras y ya está

Observar que hace nuestro país vecino: Francia

La película trata un tema actual, pero con la diferencia de que son los franceses de origen galo los que se van de Francia y los inmigrantes los que desean sobre todo permanecer.

Se estima que, empujados por la crisis económica, el terrorismo y la creciente violencia racial, casi 2 millones de origen francés están viviendo fuera de su país. 

Sube el número de emigrantes de Francia


La emigración femenina es superior a la masculina
Los franceses que huyen a otros países lo hacen principalmente a España, donde van el 10,70%, Estados Unidos, el 9,53% y Reino Unido, el 8,37%.
Contradiciendo la película, lo cierto es que el crecimiento del islam en Francia ha generado que miles de judíos franceses emigran a Israel.  Se sabe la cifra de que en el 2013 casi 120.000 judíos franceses se mudaron a Israel

A veces algunas películas recuerdan a aquella frase de Benjamin Péret que tanto fascinaba a Buñuel: “¿Verdad que la mortadela está fabricada por ciegos?”. 



Esta película tiene mucho de mortadela: un producto mediocre aunque rentable, para estómagos poco exigentes.

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